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En muchas ocasiones hemos pensado en las bondades o adversidades de nuestra actividad laboral. El caso es que ayer estuve reflexionando sobre esta cuestión que mucha gente trata de responder de acuerdo a sus impresiones personales,  sin ahondar en lo que significa y ha significado esta actividad humana.  Como ser humano me complace saber que gracias al trabajo somos lo que somos actualmente, en el sentido filogenetico y en el ontogenetico,  una  actividad que ennoblece a los que habitamos nuestro maravilloso planeta. No dudo que con cartesiana metodología algunos pongan en cuestión el motivo de mi sana alegría, al valorar la importancia del trabajo humano.  Es normal sea así, sobre todo ahora que el tiempo ha modificado el color de mis cabellos y hay quienes suponen es un indice de la decadencia intelectual, lo que a veces es cierto, para algunas personas mayores, pero que creo, afortunadamente, no en mi caso. Permite explicarme.  Desde muy joven me esfor

En  mi  pri mera   juventud ,   viv i       en un  barrio  de la  Ciudad de La   H abana ,  donde   aprendi   algunas   cos as   de   la   fi losofia   popular ,    que ,      a  pesar   de  h aber   l legado  a  mi  segunda   juventud ,  no  he   o l vidado .   R efranes ,  afirmaciones ,  populares ,  dichos ,  hasta  " principios "  cuasi  morales,    que van  guia n do  la vida  del   joven , en su  contacto   diario   con el  medio  ambiente ,   fuer a  de la  vida  familiar ,  como   aque llo  de  " si me   to cas     te  toco ", " el que da  primero  da dos  veces ", "  la peste  el  ul timo "   , " de la  carcel se sale ,   pero     del   cementerio  no" "  y " a las   mujeres  y  a   los mas  chiquitos  no se  le s   pega " , que  estimulan  la  a gresividad  y  la  formaci ó n  de la    imagen  publica.  Per o   hay  dos   que  nunca   se me   ol vidan  y  dicen :      "A L  GUAPO DEL BAR