La dirección del Estado cubano decidió cambiar el nombre del ICRT por uno que según ellos describe mejor sus funciones actuales y futuras.
Trabaje en el ICRT 23 años, allí conocí todo tipo de personas, que se destacaban por sus propias buenas y malas actitudes, no por la Institución, que en un determinado momentos abrió sus puertas, dándole empleo a un grupo de graduados universitarios, que no tenían una posible ubicación profesional, con la finalidad de mejorar la calidad de su programación, deformada por los intereses comerciales en el uso del idioma y las versiones de alguna obras universales, todo pleno de intereses loables, pero surgió la mano peluda de los intereses de los militantes del Partido socialista Popular y todo cambió radicalmente para convertirse en un reflejo de los intereses partidistas, recuerdo una persona que un día le explicaba porque determinado lenguaje y horario no era favorable para los niños en el programa "Amigo y sus Amiguitos" como única respuesta me llamó "Jabonero" algo que yo no sabia su significado, referido a los antiguos patrocinadores de la programación generalmente los fabricantes de de jabones y pastas para los dientes.
Después de todo aquello vinieron las modificaciones de textos, de contenidos en los programas, algunas injustificadas como cuando la Primer Dama de la República considero un gran error de parte mía permitir la transmisión, en el contexto de una obra de teatro, de una critica, referido a una mujer que hacia un testimonio falso contra alguien en "Testigo de Cargo", como una ofensa a las valientes mujeres cubanas. Y que a un conocido y respetable actor negro le designaran para interpretar un personaje en "Los Tres Mosqueteros", donde lo mas interesante era su nacionalidad europea. Lo que me costó salir huyendo de aquel ambiente complicado y pasarme dos zafras en la agricultura. Recuerdo que uno de los mejores directores de cine se vio en la necesidad de irse del organismo para desarrollar su trabajo como realizador de una de las mejores y mas exitosas películas cubana. Entre los famosos interpretes y en algunos momentos directora de algunos espacios televisivos estaba una dama que se dedicaba a perseguir por la Rampa a los jóvenes para cortar sus pantalones muy cerrados y sus melenas irreverentes, identificadas por ella como desviaciones capitalistas.
Un cambio de nombre puede significar mucho, sobre todo en la farándula , pero lo que hace falta es analizar su contenido de trabajo para que sea util y ayude a mejorar la calidad de la programación, que prácticamente ha perdido sus mejores valores, como aquellas aventuras que aparte de graficar la lucha independentista contribuia a que los cubanos conocieran mejor su historia y los patriotas que la forjaron. Yo me fui hace 30 años y nadie puede criticar mi trabajo, pero allí hay muchas personas que trabajan de buena fe y hacen su trabajo correctamente, ojala que después de tantos años de experiencia los dirigentes nuevos y los de antes sepan valorar su trabajo adecuadamente y solo por respeto al publico que recibe el resultado de su trabajo.
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